La historia de los hermanos húngaros Zsolt y Géza Peladi, 41 y 39 años, quienes habitan a las afueras de Budapest y viven de recolectar basura, es digna de todo guión elaborado por Hollywood, al recibir una herencia inesperada de 111 millones de euros (2 mil millones de pesos) por parte de su difunta abuela, a quien nunca conocieron tras haber sido abandonados en la calle a muy temprana edad por su madre.
Aunque la herencia originalmente era para la madre de los hermanos, pero al haber fallecido, el dinero corresponde a sus descendientes inmediatos, resultando así Zsolt y Géza afortunados:
Seguir Leyendo...
“Sabíamos que nuestra madre pertenecía a una familia rica pero ella era una persona difícil y rompió lazos con sus parientes. Ni siquiera sabemos si le contó a nuestra abuela sobre nosotros", señaló Géza.
A pesar de que los hermanos ya se imaginan las montañas de dinero, aún no pueden recibir la herencia, al tener que presentar primero el certificado de defunción de su madre, con el fin de corroborar que en realidad son los únicos herederos:
“Si esto funciona, realmente podría compensar todo lo que hemos pasado hasta ahora en la vida. Lo único que tenemos es a nosotros mismos. Pero con dinero, quizás podamos encontrar una compañera y tener una vida normal”, concluyó Geza.
FUENTE
0 Comments:
Publicar un comentario